De forma general, las indemnizaciones por despido que respetan los límites legales no tributan en el IRPF. Pero si superan los 180.000 euros, el exceso sí que tributa. Te contamos cómo actuar en estos casos.
Como consecuencia de la crisis sanitaria, tu empresa va a tener que despedir a algunos de sus trabajadores y satisfacerles una indemnización exenta de tributar en el IRPF. No obstante, ¿qué ocurre si más adelante vuelve a contratar a alguno de ellos?
Si uno de tus empleados te ha dicho que va a dimitir, y estás calculando la proporción de finiquito que le corresponde, es posible que al regularizar tu tipo de retención ese finiquito quede a cero.
Cambio legal
Hasta este momento, la ley permitía a las empresas despedir a un empleado por tener faltas de asistencia aunque estuviesen justificadas si superaban cierto número de faltas.
Las indemnizaciones por despido de altos directivos están exentas de IRPF hasta siete días por año trabajado, que tiene como máximo seis mensualidades.